lunes, 1 de agosto de 2011

Cambiar de windows a Linux


Tengo que reconocer que cuando me propusieron dejar el mundo de Microsoft y pasarme al de Linux era reticente, las experiencias que yo había tenido con Linux era en una versión no gráfica y muy críptica de comprender, vamos que el entorno de MS-Dos parecía un paseo por el campo comparado con el entorno Linux.

También debería explicar que fue la filosofía de Microsoft y mi poca tolerancia la que me obligó a probar un sistema operativo nuevo. Los que lleváis algún tiempo trabajando con un ordenador y con Windows en cualquiera de sus versiones seguro que en mas de una ocasión habéis perdido información, bien por que Windows ha dejado de arrancar, bien por que habéis cogido un virus o bien por que habéis tenido que cambiar de versión. Y fue en una de estas memorables ocasiones en las que decidí darle una oportunidad al Ubuntu. Que gran decisión !!!!

La primera y grata sensación fue la facilidad para descargarse el sistema operativo, es gratuito y de libre disposición, además esta disponible en un montón de idiomas. La siguiente fue la facilidad de instalación, conectas el ordenador a internet con cable o wifi, introduces el cd de instalación y a seguir las instrucciones de la pantalla, el idioma que quieres instalar lo primero, aunque permite tener varios idiomas con sus correspondientes diccionarios instalados simultáneamente, nombre de usuario y contraseña, y prácticamente no le has de decir nada mas. El propio sistema detecta los periféricos que están conectados a tu ordenador (impresora, tarjeta de sonido, tarjeta gráfica, scaner... etc), descarga los drivers y los instala. Es decir que según termina la instalación ya estas listo para funcionar, todo esta instalado y configurado. No solo eso, es que en el momento que tu le conectas cualquier dispositivo nuevo, como un ipod o una webcam inmediatamente el sistema se conecta para descargar lo necesario para que el dispositivo funcione. Y esto se extiende a otras necesidades como los codecs, y similares que también son instalados según necesidad sin que ni siquiera te enteres.

Una vez que te acostumbras a trabajar en el entorno Ubuntu, es difícil volver a Microsoft, es como si fueras capaz de entender todas las lenguas del mundo, si eres usuario de Windows y de office en mas de una ocasión te habrás encontrado con incompatibilidades, es decir que un documento hecho con word xx, no se puede abrir con word zz, pero la suite de oficina que lleva integrada Ubuntu, el libre Office es compatible con casi todas las suites que han salido al mercado, además es capaz de convertir cualquier documento a PDF, sin necesidad de herramientas adicionales. Por otro lado en el menú de Ubuntu, encuentras un apartado de programas que puedes descargar e instalar automáticamente según necesidad, van clasificados por temas y se pueden buscar por cualquier termino. Es decir necesitas retocar una foto, pues buscas foto y te aparecen varios programas de retoque, de organización y archivo de fotos … etc, con lo que terminas teniendo todas las necesidades de trabajo cubiertas sin tener que levantar la mano del ratón.

Otra cosa que también me sorprendió fue la seguridad que aporta con respecto a Windows, lo primero es que no se puede cambiar ningún fichero importante sin que te obligue a introducir tu contraseña de administración, con esto ya has evitado todos los virus y troyanos que corren por el mundo informático. Por otro lado si tu no dispones del nombre de usuario y la contraseña no puedes acceder a los archivos propios de ese usuario, ni aún siendo el administrador. Lo cual es lógico por que los archivos son privados.

Yo os recomiendo que os animéis a probarlo, creo que os puede sorprender tanto como a mi

viernes, 29 de julio de 2011

El mundo de los ordenadores crece a un ritmo vertiginoso. La velocidad de los procesadores se dobla cada dos años y medio, ofreciéndonos cada vez más posibilidades en diversas áreas de trabajo y ocio. Pero ¿realmente necesitamos este ritmo de avance?, al menos si lo que necesitas son programas de contabilidad o similares como puede ser el caso de una PYME. Para realizar estas funciones nos bastaría con un Pentium IV con 512 Mb si trabajamos por ejemplo con una Suite como Office . Internet ha revolucionado el mundo de la informática y la mayoría de los usuarios que compran un buen ordenador, se interesan por la forma y rapidez con la que podrán conectarse a la red. Lo que muchas veces no se sabe, bien por ignorancia o bien porque no nos informan, es que podemos conectarnos perfectamente con un Pentium IV. Es importante destacar que lo que determina la velocidad de Internet es la línea y la tarjeta de red, independientemente del equipo que tengamos. Muchas veces la tecnología avanza más rápido que nosotros y utilizamos máquinas que en cierta manera nos vienen grandes y a las que no sacamos todo el provecho que nos ofrecen. Por ello, ¿por qué empeñarnos en gastar dinero en ordenadores o máquinas informáticas cuando podemos tener lo que queremos a la mitad de precio?
Las empresas de informática usada se dedican al mercado de ocasión y ofrecen ordenadores que ya se han quedado “anticuados” en esta revolución tecnológica que avanza velozmente día tras día. Estas máquinas cubren las necesidades de usuarios a nivel no profesional y de pequeños empresarios a un precio muy reducido. También ofrecen todo tipo de máquinas como impresoras láser, matriciales, que completan así todos los equipos que demandamos o necesitamos.
Estas empresas se están abriendo paso en el mercado y crecen día a día ofreciendo otras alternativas a las últimas tecnología a las que todo el mundo aún no ha llegado. Aquí os dejo un link de algunas tiendas especializadas en la venta de ordenadores de segunda mano .

Ordenadores Segunda Mano